La ruta del estraperlo es un recorrido histórico que sigue los pasos de los contrabandistas que durante décadas se movían entre estas localidades en la provincia de Álava para transportar productos que se encontraban prohibidos. Desafiaban a la Guardia Civil en los diferentes pasos de montaña de la Sierra de Cantabria un hecho muy habitual especialmente después de la Guerra Civil Española, en plena posguerra y con la cartilla de racionamiento en vigor, por aquellas personas que pretendían comercializar ilegalmente con bienes para evitar el pago de tasas e impuestos. Se denominaba estraperlo, y quienes se dedicaban a esta actividad los estraperlistas quienes tenían como objetivo principal el poder dar el esquinazo a los guardias civiles que vigilaban el monte.
Del viejo molino de Kripan se dice que es protagonista de varias leyendas y que en esos años de posguerra abastecía una amplia zona con su pan. De Bernedo se traían patatas y se llevaban el vino de Meano, y de Marañón procedía la harina, a través del paso por el puerto de la horca (mojón), localidad donde precisamente se encontraba el puesto de la Guardia Civil más próximo que vigilaba toda la zona.
Reviviendo la historia del contrabando y fortaleciendo lazos comunitarios son los objetivos que persigue esta iniciativa que se ideó coincidiendo con la pasada pandemia de 2020 y que tomó cuerpo dos años más tarde en 2022 cuando por fin pudo organizarse.
Este es el cuarto año consecutivo en que se celebra el encuentro entre los vecinos de Elvillar y Bernedo para rendir homenaje a las personas que marcaron la historia de la zona. En 2002, este reconocimiento se hizo a Florencio y Silvi en la localidad de Bernedo, donde concluye esta ruta. En 2023, el homenaje fue para Félix García, vecino de Elvillar, quien con 91 años era el último estraperlista vivo de la localidad. Félix recibió el homenaje y los aplausos de todo el pueblo, y se le dedicó un emotivo Agurra.
- «Comed, beber, bailar, enamoraros y larga vida al mundo rural porque este es un día de homenaje, reconocimiento, de reencuentro, descubrimiento y también de fiesta, este fue el mensaje que se quiso transmitir en la primera edición y que se repite año tras año»
El año pasado, al ver que ya no quedaban muchas personas de avanzada edad con vida, se decidió rendir homenaje a los estraperlistas con la colocación de una placa en el frontón de Bernedo, un gesto que se repetirá este año con una nueva placa en esta localidad. Desde la organización adelantan que, además del homenaje, habrá una sorpresa que no quieren desvelar aún.
Uno de los actos principales de esta fiesta de hermanamiento será la comida popular, que reunirá a unas 260 personas, cuyo plazo de inscripción finalizó hace algunos días. El programa para el próximo sábado 10 de mayo incluye, además del homenaje, euskaldantzak, pintxopote, trikipoteo, partidos de pelota, primis y competiciones rurales entre ambos pueblos, así como la música del DJ Gotzon.
No se busca una celebración masiva, sino todo lo contrario. Aunque todos serán bienvenidos, el objetivo es fomentar el hermanamiento entre las dos localidades y disfrutar de un día sencillo, en el que el encuentro con vecinos y amigos de la zona se sienta como estar en casa. Este año por último nos apuntan desde la organización, es su intención de que la gran mayoría de los participantes en esta marcha vayan vestidos con ropa que recuerde a la postguerra Civil, ( estilo).
Txomin Ruiz.