
Izan y Jon Ander, dos jóvenes corredores de Oion, protagonizarán una hazaña que va mucho más allá del deporte: recorrerán 170 kilómetros sin descanso desde Bermeo hasta su pueblo natal, siguiendo la histórica ruta GR38, la “Ruta del Vino y del Pescado”. Su objetivo es dar visibilidad y apoyo a quienes viven con ataxia telangiectasia (AT), una enfermedad rara y neurodegenerativa que afecta a niños y jóvenes, minando su coordinación y fuerza física, pero no su lucidez ni su espíritu.
Inspirados por Patxi, presidente de la asociación AEFAT, y por la lucha diaria de su hijo Jon, estos dos amigos decidieron transformar kilómetros en compromiso. “Si ellos no tiran la toalla, nosotros tampoco”, repiten como mantra, mientras se preparan para afrontar tramos tan exigentes como el ascenso entre Durango y Otxandio, que les recibirá al atardecer. Alternarán carrera y marcha rápida, que harán relevos y dos ciclistas que les acompañarán, en un recorrido que será transmitido en directo a través de Instagram.
Gran fiesta solidaria en Oion
La llegada a Oion se convertirá en una gran fiesta solidaria: marcha popular, talleres para niños, gaiteros llenando de música las calles, conciertos, comida, discoteca y el tradicional torillo de fuego, que unirán a vecinos y visitantes en una misma causa. Quienes quieran sumarse a esta fiesta solidaria lo pueden hacer inscribiéndose contando para ello con tres opciones distintas.
Con 20 patrocinadores en la camiseta, la iniciativa planea expandirse 59 sorteos por rifa. Se agradece la colaboración de los 40 patrocinadores actuales, y se informa que la comida cuenta con 150 participantes y la marcha con 128. En los últimos tres días, se han sumado 50 personas al proyecto. Unas 30 que correrán junto a ellos desde Laguardia y otras 12 que se sumarán en Assa, dando calor humano a los últimos kilómetros nos cuenta Izan.

Las camisetas oficiales destinadas al público ya tienen agotadas las tallas L y XL, mientras que las camisetas con todos los patrocinadores serán llevadas exclusivamente por Izan y Jon Ander durante todo el reto.
Más que una carrera, será un testimonio de que la fuerza del corazón puede vencer cualquier obstáculo y llevar semillas de esperanza allí donde se corre.
Txomin Ruiz.