No están todos catalogados, en la actualidad serian 109 según el instituto Alavés de Arqueología aunque las estimaciones oscilarian entre los 100 y 200 en su número. Se conocen en Rioja Alavesa desde el siglo XI aunque ya antes en Taranco, en el norte de Burgos apareciese por primera vez la palabra «torco» = prensa según Salvador Velilla que este próximo viernes 19 de enero va a ofrecer una charla sobre los lagares rupestres de Rioja Alavesa en la localidad de Lanciego.
- Algunos estudiosos de los lagares rupestres han llegado a afirmar que muy posiblemente nos encontramos ante la concentración más importante de Europa entre nosotros en Rioja Alavesa
El pasado año EH Bildu no obstante solicitó ante la diputación foral de Álava la recuperación del paisaje rupestre de Rioja Alavesa, su catalogación y sobre todo su protección por encontrarnos ante un patrimonio de excepcional valor histórico etnográfico y cultural declaraba esta formación.
Los lagares son estructuras excavadas en afloramientos rocosos areniscos, que incluyen una plataforma de estrujado, uno o varios canales de comunicación y un depósito para recibir el mosto. Solían estar cerca de las viñas, lo que permitía que la uva se convirtiera en mosto de inmediato, sin el largo proceso de fermentación en cubas que caracteriza las producciones actuales.
Lo cierto es que en toda la SonSierra según el investigador Salvador Velilla los podemos encontrar desde las Conchas de Haro hasta Labraza y Oion todos ellos excavados en roca y extendidos tanto al norte como al sur de la A-124..
Los lagares suelen constar de una Pilar de poco más de metro y medio de diámetro donde se pisaba la uva y un torco donde caía el mosto. Uno de los más emblemáticos lo podemos encontrar en Elvillar.
La historia de los mismos y su presencia entre nosotros va a ser el motivo de una charla que El etnógrafo Salvador Velilla ofrecerá este viernes 19 de enero en el centro social de la localidad de Lanciego’, sin duda muy interesante.
Txomin Ruiz.