Hasta un total de 72 vecinos de Laguardia sufrieron las consecuencias del alzamiento Nacional en 1936. Muchos de ellos fueron asesinados vilmente; otros, los más afortunados, tuvieron que acogerse al destierro, y sus bienes les fueron despojados. Perseguidos por sus ideas, fueron ingresados en prisiones, recibieron cuantiosas multas, perdieron sus empleos o sufrieron el escarnio público. «No vuelvas si no vences» es el es el libro sobre estos represaliados escrito por Javier Gómez Calvo, que fue presentado ayer en esta villa como antesala del emotivo homenaje del pueblo de Laguardia a todos sus hijos, a través de un monolito y una placa conmemorativa situada en el collado, justo enfrente de otro hijo ilustre de la localidad, Félix María de Samaniego.
Perpetradores y víctimas en la España del odio
Antes en.un salón parroquial abarrotado de vecinos de la localidad, Javier Gómez Calvo presentó su libro, enfocado en los perpetradores, los discursos de odio y cómo estos se legitimaron socialmente en esta villa. El autor sostiene que el periodo iniciado con el golpe de Estado de 1936, seguido por una ola de violencia política y cuatro décadas de dictadura, ha sido ampliamente estudiado. Estos estudios se han centrado principalmente en los orígenes del terror y cómo se desarrolló y adaptó con el tiempo. Durante la Guerra Civil, la investigación ha puesto mayoritariamente el foco en las víctimas de la persecución ideológica.
- La violencia política en Laguardia durante los años 30 y 40 del siglo XX está ligada a los alcaldes de la época. A diferencia de otras geografías, el poder civil local tenía gran autonomía sobre el militar. El libro menciona a la banda de Briones, aunque probablemente no fue la única que aterrorizó a los vecinos
Sin embargo, esta obra, sin dejar de lado ese análisis ni olvidar a las víctimas, se centra también en los perpetradores del odio en Laguardia, una localidad alejada del frente y con una clara mayoría contrarrevolucionaria. Además, Gómez Calvo añade que este análisis se enmarca en un contexto histórico más amplio, considerando la influencia de otros episodios violentos, desde la invasión napoleónica hasta el terrorismo, pasando por las guerras carlistas.
Tras una visita a la Sociedad de Amigos de Laguardia, que posee unos interesantes fondos y material de la Guerra Civil, se dio paso a la ceremonia de homenaje, así como a la ofrenda floral. Uno a uno, se leyeron los nombres de todas las personas con vecindad en Laguardia que en algún momento fueron represaliadas. Un homenaje, afirmaba el alcalde de la localidad, Raúl Ezquerro, que llega tarde, pero que es merecidísimo y que el Ayuntamiento ha querido tributar aprovechando la publicación de este libro, el cual será presentado próximamente también en la capital alavesa. Hay más imágenes de lo vivido en el día de ayer en Laguardia.
Txomin Ruiz.